Hola a todos,

Hoy quiero compartir con ustedes una experiencia que tuve recientemente. Como saben, siempre estoy en busca de nuevas aventuras y lugares para capturar con mi cámara. Esta vez, mi viaje me llevó a Hato Rey, un vibrante distrito financiero y comercial en San Juan, Puerto Rico, donde descubrí un lugar fascinante llamado Vintage Garage.

En varias ocasiones, mientras transitaba por la ciudad, me encontré pasando por este local lleno de autos antiguos. La curiosidad me picaba cada vez que pasaba por allí, y finalmente, un día decidí detenerme y explorar.

Con mi cámara Nikon Z6II en mano, me acerqué a la verja metálica del lugar. Para mi suerte, había una persona allí. Un caballero amable se acercó y me preguntó si podía ayudarme. Le expliqué que era un fotógrafo y que estaba interesado en fotografiar los autos. Para mi sorpresa, no solo me permitió pasar, sino que también me dio la libertad de explorar a mi gusto.

El día estaba nublado, lo que resultó ser una bendición disfrazada ya que no tuve problemas con la luz fuerte, a pesar de que el lugar no tenía techo. Sin embargo, debido a las condiciones nubladas, a veces se oscurecía y tenía que ajustar el ISO de mi cámara para compensar la falta de luz.

Lo que realmente representó un desafío para mí fue la forma en que estaban organizados los autos. Esto me brindó la oportunidad de experimentar con la composición. Además, el agua acumulada en el suelo a causa de la lluvia, me ofreció un componente extra para añadir reflejos en mis fotografías.

El caballero me contó que los autos se alquilaban para videos y películas, lo que me pareció muy interesante. Me hizo pensar en todas las historias que estos autos podrían contar.

Después de un rato de exploración y fotografía, volví a casa con una sensación de satisfacción. Aunque estaba ansioso por ver si había logrado capturar buenas imágenes, me sentí contento con la experiencia.

Al llegar a casa, pasé las fotos a Lightroom y comencé a trabajar en ellas. Para mi deleite, el resultado fue muy satisfactorio. Me gustó lo que logré, a pesar de ser algo improvisado.

Ahora, tengo una idea para realizar una sesión allí en el futuro. Pero eso, queridos lectores, es una historia para otro día.

He compartido algunas de las imágenes aquí, y pueden ver más en Instagram y Threads. Espero que disfruten viéndolas tanto como yo disfruté tomándolas.